un coto tanto para seca como para ninfa, las tablas, raseras y pozos se
alternan con frecuencia, así la técnica a emplear también dependerá en
gran medida de las condiciones del rio, ya que el caudal varia
notablemente en función de la época del año y del agua que suelten en
las presas que se encuentran aguas arriba.
Si lo pescamos a ninfa
no nos olvidemos de usar hilos entre el 0,12 y 0,14 , si queremos ser
capaces de engañar a esos ejemplares que dan fama a este EDS debemos
equilibrar en su cierta medida nuestro aparejo, para que sea efectivo y
nos permita engañar a las pintonas , pero que a la vez resista los
envites y bravura de ejemplares como los que podemos clavar en este
tramo.
Ante la ausencia de actividad en superficie no debemos
dudar en poner las ninfas y rastrear los fondos de pozos y corrientes,
será esta la mejor opción para conseguir algún buen ejemplar. No nos
olvidemos que más importante que la forma de nuestras ninfas será que
estas se pongan en la zona de pesca con rapidez para aumentar los metros
de pesca y así nuestras oportunidades de éxito.
A seca optaremos por pequeñas efémeras y tricópteros que irán en función de la época de año y de lo que observemos a pie de rio.
Ánimado
y con la caja repleta de moscas me dispuse a pescar este tramo, que un
tiempo atras había pescado mi compañero con buenos resultados.
El
día era de los que no prometen, frio y nublado y el caudal un tanto
escaso, es lo que tiene pescar tramos como este en Octubre, una
auténtica quiniela.
De todas Formas nada más empezar me anime,
primera tirada con las ninfas y primera trucha de buen tamaño que se me
suelta, a la siguiente otra me parte el terminal y después se acabaron
las grandes, las capturas se sucedieron una tras otras bonitas pero
normalitas.
Ya sería por la tarde cuando observe las primeras
cebadas cuando cambie a la seca, las pequeñas efémeras y tricópteros
eclosionaban y las cebadas eran un tanto escasas pero me brindaron
varias oportunidades.
Me despedí de este legendario tramo
durante el sereno en la tabla por encima de la pasarela de Villamor,
prácticamente sin moverme y lanzando a las cebadas fui engañando una
tras otra a las pintonas que se cebaban a escasos metros de mí, algunas
consiguieron librarse de mi pequeña efémera que fue de lo más efectiva.
Las
secas que nos dieron mejores resultados fueron las pequeñas olivas en
spent y las emergentes de liebre tambien en anzuelos del 20.